Si tienes una iguana has de saber que son animales acostumbrados a climas cálidos y que debes tenerlos en un terrario adaptado a sus necesidades. En esta época del año, con la llegada de las bajas temperaturas, es necesario tener más cuidado aún con este tipo de animales, ya que el frío puede perjudicarlos y llegar a producirle lesiones graves.
Hay que recordar que las iguanas no hibernan, ya que están acostumbradas a climas tropicales en las que el invierno no es tan fuerte, por lo que si notas que tu mascota está aletargada es que algo le ocurre, por lo que deberías acudir a tu veterinario. Durante todo el año debe darle el sol, de manera directa y filtrándolo a través de plástico o cristal adecuado para este tipo de animales.
Además, es importante la humedad del terrario, tiene que ser de entre 80 ó 90% y con rocío constante. Las iguanas toman el agua de las hojas y ramas y no de zonas estancadas, como hacen otras mascotas. Las iguanas también agradecen una zona de baño con agua caliente, que ronde los 40º, con lo que se sentirán como en casa.
Por último, es importante proporcionar, dentro del terrario, algunas zonas oscuras y con temperatura un poco más baja que el resto para que la iguana se acomode donde quiera según sus preferencias. Una zona muy caliente puede ocasionarle quemaduras u otras lesiones, mientras que una zona fría puede dañar el metabolismo de nuestra mascota. Por ello es muy importante consultar con especialistas antes de adquirir un animal de este tipo, ya que requiere cuidados especiales que otros no nos exigen. Y recuerda que en determinadas épocas del año, como en el celo, las iguanas macho pueden ser agresivas, con lo que no es recomendable que estén en contacto con personas ajenas o incluso otras iguanas.