Te contamos cómo influye la castración en el comportamiento de los perros.
Disminuye enormemente las ganas de escaparse del hogar.
Disminuyen sus peleas con otros machos debido a una hembra o los orines de ella. Ya no existe ese desespero en la búsqueda de orines.
Ni existe esa impulsividad y control de las hembras del hogar.
Hay que tener claro que un perro castrado no tiene porqué ser menos agresivo por el hecho de estar castrado. La castración en si misma no disminuye la agresividad.
La castración disminuye los motivos para discutirse; un perro castrado tiene menos razones para discutirse, lo que no quiere decir que no discuta y no sea agresivo. A parte de los impulsos sexuales, hay otros estímulos que desencadenan discusiones y agresiones.
Cuanto antes se realiza la castración en un perro bien socializado, pero después de la pubertad, como hemos dicho, tendremos menor posibilidad de discusiones y mejor comportamiento.
Disminuye los motivos para dejar marcas urinarias, por lo tanto los orines en el interior del hogar son menores.
