Los perros, a menudo, viajan con nosotros de vacaciones a otras ciudades, zonas o países del mundo y aunque nos preocupamos mucho porque estén cómodos durante el viaje y que no sufran demasiado, lo cierto es que las necesidades de los perros no quedan cubiertas cuando llegamos al destino, es decir, que aún nos quedan unas cuantas cosas por hacer para que el perro se sienta seguro y tranquilo en lo que, durante un tiempo, será su nuevo hogar.
Por eso, para evitarle estrés y problemas de conducta, cosa que puede pasar, aquí tienes algunos de los consejos a seguir para que no le pase nada.
- Cuando llegues con el perro a tu destino lo más importante es dejarlo que reconozca el lugar. Un buen paseo es lo mejor que puedes ofrecerle porque así podrá percibir los olores y conocer la zona para tranquilizarse y no pensar que está en un sitio raro.
- Ten en cuenta que tras un viaje los perros pueden perder el apetito y sentirse inseguros. Si eso le pasa a tu perro intenta no forzarle, eso sí, cólmalo de mimos para que entienda que, aunque no esté en un sitio conocido, no quiere decir nada.
- Procura enseñarle todo lo que puedas de la zona donde estáis pero siempre atado porque nunca se sabe lo que puede hacer (aunque sea el perro más manso del mundo, en un sitio extraño no se sabe cómo puede reaccionar).
