Producto del cruce entre el antiguo lulldog de pata larga y varios terriers (Terrier Inglés Blanco y Bulterrier), su crianza comenzó hacia 1865 en la región de Massachusetts, pero no fue hasta el año 1893 reconocido por el Kennel Club Americano. Inicialmente se le empleaba para peleas entre perros, pero sus cualidades de obediencia, inteligencia y fácil adiestramiento le fueron abriendo las puertas del mundo de las mascotas hogareñas.
Es muy popular en Estados Unidos, Nueva Zelanda y Australia, pero en Europa no ha podido competir con el éxito del Bulldog Francés. En definitiva, este perro tiene el apellido de los terriers, está clasificado entre los perros de compañía del Grupo 9″ y emparentado con los molosos de presa del Grupo 2°, pero no comparte el carácter de los molosoides ni el de los terriers, toda una originalidad cinológica.
