Seguro que algún día te ha sobrado pan y, cuando te has dado cuenta, has visto que ya estaba duro y que era imposible de comer. Lo más lógico es que lo hayas tirado y a otra cosa pero, ¿tienes perro? Entonces, dáselo a él.
Para los perros el pan duro es como una golosina, además de que les sirve para fortalecer su dentadura al mismo tiempo que les ayuda a limpiarse los dientes. Hace algunos años no había ni productos dedicados a la higiene dental de los perros ni tampoco cepillos de dientes y pastas de dientes específicos para ellos y las personas que teníamos perros sabíamos que, con un trozo de pan duro se limpiaban bien los dientes porque las migas del pan arrastran consigo la suciedad que puedan tener (de ahí que les guste el pan).
Por supuesto, no se debe abusar de darles el pan porque enseguida se cansan pero es una forma de mantenerle sanos los dientes.
