Cuando se quiere empezar un acuario, hay que tener en cuenta que además de entusiasmo, debemos elegir bien los peces para el acuario, porque no todos son fáciles de mantener y cuando se es inexperto se corre el riesgo de adquirir peces que no sobrevivirán. Por ello es mejor elegir los peces que son más adecuados para un principiante por requerir pocos cuidados.
El pez dorado o carpín es un encantador pez de agua dulce, que ha sido por largo tiempo un pez que ha vivido gracias a su adaptación en acuarios. Esta especie de peces es resultado de una mutación genética que les confiere el color amarillento y son de origen asiático, específicamente de China en donde durante siglos fueron utilizados en estanques para decoración y también criados para consumo humano.
Es fácil criar un pez dorado o carpín en un acuario en casa, siempre y cuando tenga suficiente agua y reciba la alimentación adecuada. La reproducción de estos peces ocurre en primavera y luego de un cambio de la temperatura del agua que promueve el deseo de los machos que persiguiendo a las hembras con golpes, hacen que liberen los huevos, los que eclosionarán entre 48 a 72 horas. Las crías son de color marrón metálico. Sin embargo no todo es perfecto algunos peces cautivos no logran reproducirse y los mayores pueden intentar comerse los pequeños o los huevos.
Pese a ser milenariamente una especie domesticada que por mucho tiempo se ha desempeñado como ornamento en estanques y acuarios, se le considera una especie un poco menos que depredadora porque su presencia puede alterar los ecosistemas en perjuicio de otras especies, por lo que no en todo el mundo son tan utilizadas. Aún así, si se quiere empezar como hemos dicho, un acuario, éste es el pez adecuado para ello.
Imagen: Vía