Si tienes un perro o un gato en casa, contigo, seguro que a la hora de ponerte a comer se vuelve como loco y siempre se queda cerca por si te «compadeces» de él y al final coges y le das algo de comida por debajo de la mesa.
Ese comportamiento, como intuirás, no es el más adecuado porque de lo que se trata es de que el perro o el gato entienda que su comida vendrá después de la vuestra, que no puede comer ni portarse así mientras vosotros estáis comiendo, sea quien sea quien le de de comer.
En mi caso mi perro tiene dos comportamientos diferentes, y seguro que te ocurre igual a ti. Uno es para conmigo, se porta bien, se tumba a mi lado y no pide nada hasta que yo me levanto, hora en la que, si ha sobrado algo, se lo ofrezco porque ya he terminado de comer.
El otro caso es con el resto de mi familia, se pone a ladrar, intenta subirse, llama la atención, todo para que le den comida y como sabe que así lo consigue fomentan más ese comportamiento.
Los perros, y los gatos, han de comer siempre después de las personas y mientras nosotros comemos no se les debe permitir que intenten pedir comida.
