Esta es una de esas historias que nos sorprenden y nos alegran el día. Es la historia de Poldi, un gato que se perdió hace 16 años y que ahora volverá a vivir con su dueña. Uno de esos milagros navideños, pero en pleno mes de abril.
La dueña, una mujer alemana, perdió a su gato hace 16 años. Después de buscarlo arduamente, lo dio por muerto al no poder localizarlo. Ahora ha sido encontrado y ya se ha reencontrado con ella. El felino, aparentemente, ha vivido en una zona boscosa cerca de Munich durante todo este tiempo, logrando así sobrevivir.
Los escépticos dirán que no es el mismo gato y que cómo podemos saberlo. Un tatuaje tiene la solución. Gracias a esta marca, la dueña ha identificado a su mascota, con la que se reunirá años después de verlo por última vez. En una de sus orejas, esta mascota tenía tatuado un número de identificación. Gracias a él, los responsables del refugio donde una familia lo llevó pudieron ponerse en contacto con su dueña, que viajo rauda y veloz sin poder casi creerse la noticia.
Ahora, mascota y humana vivirán el resto de sus días juntos, tal y como hubiera debido ser de no haberse perdido. Nos queda la curiosidad de conocer el desenlace de esta historia: ¿se adaptará bien el gato a la vida en una casa? ¿Seguirá cazando para comer o se acostumbrará rápido a la buena vida de mascota doméstica alimentada con sabrosos piensos? Sea como sea, no nos queda duda de que su dueña no se separará de él ni un solo instante.
